¡Hola, soy Victoria!
Siempre he sido una persona inquieta, curiosa y aventurera, lo que me llevó a querer buscar más allá de la comodidad de mi pueblo y abrirme a nuevas experiencias.
Lo tenía “todo” al poco de llegar a vivir a una gran ciudad: Un buen puesto en una empresa estable y reconocida, independencia económica, la pareja estable y buenos amigos. Pero recuerdo esta sensación constante de vacío, de que a pesar de haber conseguido lo que buscaba, faltaba algo en mi.
En plena crisis personal empecé a interesarme y adentrarme en el mundo del desarrollo personal y encontrar mi para qué. Encontré en la conexión con el cuerpo una herramienta increíble que me ayudó a conocerme y a crecer, y me aventuré a formarme en algo completamente nuevo para mi, con la constancia y perseverancia que me definen y superando los miedos a no ser aceptada en mi nueva forma de estar en el mundo.
El Masaje Californiano llegó a mi vida casi por “casualidad” de la mano de Spazio Masaje Californiano y desde el primer momento me cautivó. Empiezo a dar y recibir masajes y es entonces cuando me doy cuenta de que el cuerpo lleva el registro de todo lo vivido, de que es la llave que me conecta conmigo misma, y que la sanación se encuentra dentro de mí, dentro de cada uno de nosotros.
A través del masaje consigo conectar con mi cuerpo y detectar y aflojar bloqueos y traumas a los que no había podido llegar de otra forma, y me ha abierto las puertas a una parte de mi que sentía olvidada: Mi intuición, mi sensibilidad, mi profundidad, mi empatía y mi amor por la presencia y el contacto pleno.
Poner estas cualidades al servicio de los demás y acompañar a las personas a conectar con su cuerpo físico, emocional y espiritual a través del tacto consciente es mi granito de arena en el camino hacia el bienestar.